La semana pasada unos tíos celebraron sus bodas de plata (25 años de casados) y fuimos invitados a la fiesta. No vengo a contarles la fiesta. Vengo a contarles... pues... algo relacionado con el titulo; que comienza a partir de la entrada al salón.
En cuanto entro a cualquier lugar donde hay mucha gente lo que generalmente hago es buscar a la chica mas guapa, es como una mala maña mía (aunque sospecho que todos lo hacen...); después de recorrer todo el salón con la mirada encontré un par de chicas guapas e hice fue lo que mi naturaleza me ordena como hombre... Eso hubiera estado bueno e interesante pero no, fui a sentarme como todos los demás.
Sirvieron la comida y yo seguía con la espinita de querer acercarme a aquellas lindas mujeres así que en mi mente idee varios tipos de acercamientos, la mayoría a mi parecer solo servirían si eso hubiese sido una película. Después de un rato me aburrí y comencé a hablar con mi prima. Me divertí durante la platica y después de un rato, ya estaba en estado. Tenia la suficiente confianza como para levantarme e ir con aquellas guapas de la fiesta. Me arme de valor, me arregle el cabello, pensé algunas frases y justo cuando me levante... llamaron a todas las mujeres a la víbora de la mar. Pasamos los hombres, lanzaron por el aire al novio y luego que todo terminó, había perdido mi confianza y volví a sentarme.
Quedé algo decepcionado de no tener el valor de ir con ellas, así que salí a platicar con un primo y su amigo. Nos quedamos platicando en una mesa que había afuera del salón y entonces llegó a mi mente que si eso fuese una película: "las chicas" saldrían en grupo, se sentarían con nosotros "los chicos" y todos platicaríamos juntos... Pues no se que energía invoque o que magia realice, pero tal cual lo pensé, sucedió. Ellas salieron en grupo de 4, nosotros eramos 3, llegaron a sentarse a nuestra mesa y justo cupimos los 7 sentados.
Todos comenzamos a platicar como si nos conociéramos de hace tiempo, yo me veía calmado... relajado... dueño de la situación... pero por dentro mi corazón iba a cien por hora ya que la chica que me gustaba estaba ahí (las otras no estaban tan guapas, se veían mejor de lejos, debo decir), entonces volví a imaginar que si estuviese en una película, de momento mi primo se iría, ella se sentaría junto a mi y platicaríamos ella y yo como si estuviésemos solos. Sonará increíble pero eso mismo que pensé, volvió a suceder por arte de magia, mi primo fue al baño y sin que yo se lo pidiera, la chica que me gustó se sentó junto a mi, (mi corazón latía cada ves mas deprisa) y para acomodarse, se acerco aun más a mi. Mi mente iba mas deprisa que de costumbre e imagine de nuevo que si eso fuese una película, ella me miraría y me empezaría a platicar con naturalidad y confianza. Esta vez el efecto fue mas veloz. Ella se volteo hacia mi, me pregunto mi nombre y parecía que se interesaba cada vez mas en mi. Todo iba sobre ruedas. Teníamos gustos en común, platicábamos muy fluido y en confianza, todo lo demás perdía importancia a nuestro alrededor...
Era como en las películas. |
En ese momento yo sabía que tenia un superpoder, el superpoder de convertir lo que yo imaginara de película, en una Realidad. Así que decidí usarlo una vez más: imaginé que en una película todos se irían a bailar y yo me quedaría con ella. Funcionó de nuevo. Todos se fueron menos ella; se quedó ahí platicando conmigo. Aprovechando que estábamos solos decidí hacer un ultimo uso de mi superpoder. Imagine que después de un momento mas, nos besábamos y comprendíamos que era el destino estar ahí. Pues ahí viene lo increíble, al menos para mi.
Les comento: yo durante mi conversación habitual con cualquier persona que sea de mi confianza, tiendo a mencionar la muletilla "wey" o "we" sin embargo lo digo rápidamente por lo que es casi imperceptible. Ok volvamos a la historia...
En ese momento a solas con ella yo me sentía en libertad total, estaba siendo yo mismo, me sentía en confianza y ella también parecía estar en confianza. Bueno... pues lo increíble fue que:
Yo le pregunte:
-Y que más te gusta hacer we? - No les miento, así de imperceptible fue, casi puedo jurar que solo fue como un "jue" o "hue", algo así como un suspiro, sin embargo ella me dijo con una sonrisa.
-Me CAGA que me digan wey. -Fue una sonrisa irónica por si no lo notaron. Y esa fue la respuesta más cortante, fría y rápida que me ha dado una mujer en toda mi vida (hasta ahora).
Quede un poco shockeado, no supe que responder fue como si la imagen perfecta de ella y yo juntos platicando... se rompiera en mil pedazos y se cayera al suelo. Que puedo decir... Me quede estático; tan pronto como ella terminó su frase se levanto y se fue. Ahí quede yo: Solo en una mesa para 7. Que fracaso.
Pasadas unas 2 horas yo salí a fumar un cigarrillo... (Mentira.. no fumo.) Salí a comerme una paleta de dulce. Y entonces vi que aquella chica que me gustó salió justo detrás de mi, me aleje caminando y poco a poco escuche como se acercaban unos pasos hacia mi. Adivinen, si eso fuese una película que hubiese sucedido? La chica sale, platica con el chico y terminan en un beso apasionado... Pues debido a eso es el titulo.
Los pasos llegaron finalmente. Creí que era la chica y me acerque para invadir su espacio personal y justo antes de hacer contacto físico... me di cuenta que era mi primo.
No se imaginan la vergüenza. Me aleje con una cara de apenado y pretendí que nada paso. El se quedo algo sorprendido por mi intento de violación frustrado pero espero que el algún día lo olvide y no crea que soy un pervertido.
La moraleja que aprendi es que...
La vida no es como en las películas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario